Resistencias

Desarrollar resistencias a la medicación quiere decir que los fármacos que tomas para frenar la reproducción del virus ya no hacen efecto y la carga viral sube.

Los virus procuran defenderse de los fármacos y a veces lo consiguen porque tienen la capacidad de cambiar su forma (mutaciones). De esta forma el fármaco deja de hacer el efecto esperado.

Las resistencias pueden desarrollarse:

  • Al tomar incorrectamente la medicación.
  • Al descuidar repetidamente la toma de la medicación.
  • Al reinfectarse.
  • Por mala absorción, o problemas que dificultan el paso a la sangre de los medicamentos.

Efectivamente, el VIH puede volverse resistente a la terapia antirretroviral de gran actividad, especialmente en pacientes que no toman sus medicamentos en el horario debido cada día. Actualmente, hay disponibilidad de pruebas genéticas para determinar si una cepa de VIH es resistente a un fármaco en particular. Esta información puede servir para determinar la mejor combinación de fármacos para cada persona y para ajustar el régimen farmacológico si éste comienza a fallar. Estas pruebas se deben llevar a cabo en cualquier momento en que una estrategia de tratamiento comience a fallar y antes de empezar la terapia.

Cuando el VIH se vuelve resistente a la terapia antirretroviral de gran actividad, se tienen que emplear otras combinaciones de fármacos para tratar de inhibir la cepa del VIH resistente.